¿Qué es una API y para qué sirve?

¿Para qué reinventar la rueda? Esa es la pregunta clave cuando se habla de este tema, pues, tal y como las define el equipo de AWS Amazon, las API son mecanismos que permiten a dos componentes de software comunicarse entre sí mediante un conjunto de definiciones y protocolos. Por ejemplo, el sistema de software del instituto de meteorología contiene datos meteorológicos diarios. La aplicación meteorológica de su teléfono “habla” con este sistema a través de las API y le muestra las actualizaciones meteorológicas diarias en su teléfono.

De esta manera, no es necesario programar de cero un módulo enfocado en aportar datos meteorológicos al software en desarrollo, cada vez que aparezca un proyecto que lo requiera. Tan solo tocará acudir a la API, hacer la conexión y que así aporte la funcionalidad requerida. En pocas palabras, las API permiten que diferentes aplicaciones se entiendan entre sí, sin importar qué software o lenguaje se haya utilizado para crearlas.

Si lo deseas, podrás profundizar en este tema y aprender a desarrollar tus propias APIs utilizando Python en nuestro curso de ‘Creación y consumo de APIs con Django REST Framework‘. Django Rest Framework es una herramienta que facilitará el desarrollo de APIs para tu sitio web. Esto te permitirá acceder, modificar o eliminar datos del servidor a través de una aplicación.

¿Cómo funciona una API?

En cuanto a su funcionamiento, el equipo de IBM da una respuesta magistral:

Una manera fácil de comprender el funcionamiento de las API es examinar un ejemplo común: el procesamiento de pagos de terceros. Al realizar una compra en un sitio de comercio electrónico, es probable que se te pida “Pagar con PayPal” u otro sistema similar de terceros. Esta funcionalidad se apoya en las API para establecer la conexión.

• Cuando el comprador selecciona el botón de pago, una API realiza una llamada para obtener información, también conocida como solicitud. Esta solicitud se transmite desde una aplicación al servidor web mediante el identificador uniforme de recursos (URI) de la API e incluye un verbo de solicitud, encabezados y, ocasionalmente, un cuerpo de solicitud.
• Una vez que la API recibe una solicitud válida desde la página web del producto, realiza una llamada al programa externo o al servidor web correspondiente, en este caso, el sistema de pago de terceros.
• El servidor responde con la información solicitada.
• La API transfiere los datos a la aplicación solicitante original, en este caso, el sitio web del producto.

Aunque la transferencia de datos puede variar según el servicio web utilizado, las solicitudes y respuestas se llevan a cabo a través de una API. Esta interacción no es visible en la interfaz de usuario, lo que significa que las API intercambian datos dentro de la computadora o la aplicación, presentándose al usuario como una conexión sin problemas.

¿Es posible crear tu propia API?

¡Sí! A pesar de que existen distintas políticas de lanzamiento según cuál es el propósito de las mismas, los costos de mantener funcionando el flujo de datos que manejan y por supuesto las intenciones de la organización que la haya lanzado, también es posible que un usuario cree su propia API y esta pueda ser usada por terceros.

He aquí una serie de pasos a considerar si se desea crear una API personalizada, cortesía de Byron Vargas, especialista en desarrollo web:

1. Entender el propósito: Antes de comenzar a codificar, es fundamental comprender claramente el propósito y las funcionalidades que deseas lograr. ¿Qué tipo de datos quieres intercambiar? ¿Qué acciones deseas permitir a los usuarios de tu API realizar?
2. Planificar la estructura: Es crucial diseñar la estructura antes de escribir cualquier código. Esto implica determinar qué endpoints (URLs) necesitará y qué tipo de datos se enviarán y recibirán a través de estos endpoints.
3. Elegir el lenguaje de programación y el framework: Para crear una API personalizada, es necesario seleccionar el lenguaje de programación y el framework más adecuados. Existen diversas opciones disponibles, como Node.js con Express, Django para Python o Ruby on Rails, entre otros.
4. Desarrollar los endpoints: Los endpoints son las rutas dentro de tu API que permiten realizar diversas acciones. Por ejemplo, podrías tener un endpoint para obtener todos los usuarios registrados o para agregar un nuevo registro. Aquí es donde escribirás el código para manejar las solicitudes y respuestas.
5. Implementar la autenticación y autorización: Para la protección contra accesos no autorizados, debes implementar mecanismos de autenticación y autorización. Esto garantiza que solo los usuarios autorizados puedan acceder y realizar acciones
6. Realizar pruebas y depurar: Es esencial realizar pruebas exhaustivas antes de poner tu API en producción para asegurarte de su correcto funcionamiento. Identifica y soluciona cualquier error o comportamiento inesperado que puedas encontrar.
7. Documentar: Un aspecto clave es proporcionar una documentación clara y detallada para los usuarios que deseen integrarse con ella. Esto incluye describir todos los endpoints, los parámetros requeridos y las respuestas esperadas.

¿Cuáles son los beneficios de incorporar APIs?

La incorporación de APIs (Interfaces de Programación de Aplicaciones) en la página de tu empresa puede ofrecer una variedad de beneficios. Aquí hay algunos de ellos:

1. Integración de Servicios: Permiten la integración de servicios y funcionalidades externas en tu página web. Puedes incorporar características como procesamiento de pagos (más métodos de pago), mapas, análisis de datos, redes sociales (más alcance), entre otros, sin tener que desarrollar estas funciones desde cero.
2. Mejora de Experiencia del Usuario: Integrar servicios a través de estas puede mejorar la experiencia del usuario al proporcionar funciones adicionales y facilitar procesos, como autenticación única, recomendaciones personalizadas o funciones sociales, que enriquecen la interacción del usuario con tu sitio.
3. Actualizaciones Automáticas: Por lo general, si dependes de servicios externos a través de APIs, las actualizaciones y mejoras que realice el proveedor del servicio se reflejarán automáticamente en tu página, sin necesidad de intervención adicional por tu parte.
4. Eficiencia en Desarrollo: Usarlas puede acelerar el proceso de desarrollo al aprovechar las soluciones existentes en lugar de construir todo desde cero. Esto no solo reduce los costos, sino que también acelera la implementación de nuevas características.
5. Acceso a Datos Externos: Puedes aprovecharlas para acceder a datos externos relevantes para tu negocio. Por ejemplo, obtener información meteorológica, tasas de cambio, noticias u otros datos que puedan ser valiosos para tus usuarios.

En definitiva, incorporarlas es comparable con el uso de herramientas automáticas. Martillar a mano un trozo de metal al rojo vivo es funcional para forjar, pero ciertamente es menos agotador el trabajo de herrero si se tiene un martillo pilón, que por sí solo es capaz de ir golpeando el metal según el ritmo que marque el herrero.

Ahora bien, no sirve de mucho agregar 50 funcionalidades nuevas a tu sitio web o aplicación si nadie lo visita, o peor, su identidad no está enfocada en ninguna de esas funcionalidades, lo que haría que estuvieses malgastando recursos. Hay que emplear la sabiduría, tal y como lo haría un viejo constructor antes de levantar un hogar. Primero hay que sentarse y calcular cuánto material hace falta y si se tiene el presupuesto para costearlo y por supuesto fijar qué es lo prioritario y qué puede esperar un poco.