“Locura en hacer lo mismo esperando resultados diferentes”
Albert Einstein.

Estamos iniciando el año 2020, y seguramente como los años anteriores se han hecho una serie de “predicciones” y especulaciones sobre lo que traerá el nuevo año. Lo cierto es que el año solo trae consigo 365 (en este 2020 366) días que, dependiendo de la óptica de cada uno, son 366 nuevas oportunidades de poder hacer algo fabuloso. Recordemos que anteriormente hablamos de la importancia del establecimiento de metas y objetivos. Para éste 2020, ¿tienes ya establecidas algunas metas?, de igual forma hablamos de técnicas para generar o incrementar la productividad en otro artículo y comentamos la técnica del pomodoro, así como algunas herramientas para poder hacer más productivo el día. Hasta hoy, ¿Has podido hacer algo al respecto con esas herramientas y técnicas de productividad?, si tu respuesta es negativa y ya leíste los artículos anteriores, tengo que decirte que estás en una zona de confort en donde nada cambiará.

La zona de confort es un lugar apacible, en donde no hay sufrimiento. Como comúnmente dicen “Se hace como que se hace algo, pero en realidad no se logra nada”; y es que es muy sencillo decir que se está haciendo algo, pero en realidad solo estamos matando el tiempo. Al final cuando ya hay algo de presión por el tiempo, lo cual nos obliga a movernos, estamos todos incómodos porque desearíamos tener más tiempo y añoramos tenerlo. Cuando pasa la situación, vuelve a pasar lo mismo, seguimos sin aprender. La clave para esto se llama disciplina. La disciplina es necesaria para poder generar un cambio. Cualquier rutina que tengamos establecida nos genera una recompensa. Cuando procrastinamos, es decir, cuando tiramos la hueva o cuando postergamos las cosas nos genera una sensación de placer, de recompensa. Ese hábito está muy marcado ya y es una rutina que el cuerpo, o quizá el cerebro, piden. ¿Cómo lograr salir de la zona de confort?: Se tiene que cambiar de hábitos.

Resultado de imagen para el bucle del habito — Imagen 1. El bucle del hábito (Duhigg, 2012)

Charles Duhigg en su libro “El poder de los hábitos”, (Duhigg, 2012) habla acerca del bucle del hábito que es un mecanismo que tenemos los seres humanos para encontrar recompensas. Todos nuestros comportamientos están definidos por éste mecanismo, en donde existe un estímulo, se genera la rutina y se obtiene una recompensa. Hablando de señales, podemos definir-lo como aquellas cosas que nos suceden de repente debido a una situación o momento percibimos “la necesidad o un deseo de algo”, pero en realidad estamos buscando una recompensa. Al detectar ese disparo, nuestro cerebro nos dirige a la rutina que es el camino más corto hacia la recompensa. En el día tenemos muchos disparos de diferentes señales que buscan recompensas.

Duhigg dice que para cambiar un hábito es necesario intercambiar un hábito por otro. No se puede eliminar uno de manera automática, sino que éste hábito no deseado debe ser sustituido por otro. Pone un ejemplo acerca del hábito de fumar cigarrillos. La señal es un momento en el que el cerebro reconoce que se llega a un estado mental o a un lugar determinado que automáticamente asocia, y dispara la señal. Posteriormente, la rutina es encender el cigarrillo y fumarlo. La recompensa viene después de haber fumado ese cigarrillo, la sensación que se tiene. El ciclo se repite una y otra vez hasta que vuelve a existir nuevamente la señal de disparo. Dice que, para eliminar el hábito de fumar, se debe sustituir por otro, que interrumpa ese ciclo. Por ejemplo, caminar en lugar de fumar.

Adicional a ello, dice que se deben de eliminar los lugares a donde se acostumbra a fumar, los horarios e incluso las personas que nos hacen que se disparen esas señales. Por lo visto cambiar de hábitos pudiera parecer sencillo, pero en realidad se requiere de disciplina. Solo no hay que dejarle un espacio a la procrastinación y hay que hacer algo al respecto. La clave está en hacer. Podríamos hacer el ejercicio y darnos cuenta que la adopción de un nuevo hábito puede ser trascendental para que los demás mecanismos se disparen y poder hacer una transformación radical de nuestra forma actual de vida.

Comienza por ponerte metas. Duhigg dice que es importante que los hábitos se vayan desarrollando uno a uno y que no se pongan al mismo tiempo nuevos hábitos a desarrollar. Primero debemos comenzar por cambiar un mal hábito por uno bueno nuevo. Ya que se ha adoptado ese nuevo hábito, hay que comenzar con el otro y así sucesivamente. Como dijimos, ponte metas. Las metas en éste caso no van en función del tiempo necesariamente, sino en el logro del nuevo hábito. Podríamos hacer un nuevo programa en nuestra mente para cumplir un ciclo for, en donde el incrementa i++ sea ese nuevo hábito que se va acumulando día a día hasta transformarte. ¿Puedes programar tu cerebro? La respuesta es si, sólo es necesario que te lo propongas y que hagas el hábito y repitas el ciclo. ¿Qué tipo de nuevos hábitos puedo desarrollar? Los que desees.

Para comenzar, podrías ejercitarse y comenzar caminatas en donde máximo pongas una hora y poco a poco vayas mejorando tu tiempo. El realizar una caminata te hará pensar, te relaja, genera endorfinas, mejora tu circulación, sacas toxinas, quemas grasas, mantienes sanos músculos y huesos. Recuerda que no tienes que ser un campeón de maratón. Empieza con una hora de ejercicio leve, camina y disfruta. Pon una buena playlist y dale. Otro buen hábito, puede ser el de la lectura. Comienza por leer algo que te interese. Quizá pueda ser algo relacionado a lo que estás estudiando aquí en la plataforma, o quizá quieras leer un libro que te aporte de otras ideas. El hábito hazlo por tiempo, no leas más de 30 a 45 minutos para que no se te haga tedioso. Elige un libro ligero y un lugar confortable. Cuando termines el libro, tendrás la necesidad de agarrar otro libro. Ponte una meta de libros por mes y ve viendo tus avances. Eso genera tu recompensa.

Y por supuesto, el hábito de ingresar a la plataforma y aprender. Establece tiempos. Utiliza los calendarios, ponte horarios y disciplínate a cumplirlos. Al principio es complicado, pero cuando vas aprendiendo poco a poco le vas tomando más ritmo. Elimina los distractores, deja el móvil. Enfócate y lograrás el avance. Para que no se te haga demasiado simple, trata de ver las aplicaciones de los temas que estás viendo en la vida diaria. Ponte a ejercitar. Ve a foros como el de la propia plataforma, busca más videos relacionados al tema en YouTube o en otros grupos de Facebook o GitHub. Explora, de ese modo comienzas a reconocer los trabajos de los demás, sus aplicaciones. Esfuérzate y la recompensa llegará pronto.

Te dejo este video que espero te ayude a pensar acerca del trabajo que se debe hacer para generar un cambio. El año nuevo no trae nada por si solo, las oportunidades las generas diariamente con tus acciones. Feliz 2020 y que sea un año muy productivo.